
Ayer corrió el rumor de que Calderón (el preciso, no el monero) andaba buscando desesperadamente al Peje para juntarse en lo oscurito y sacarse la foto "legitimadora", no hubo nadie del gobierno federal que confirmara la supuesta invitación, pero prestos, primero Federico Arreola, puso las "condiciones" mínimas para realizar tal encuentro:
1. Que pida perdón por el fraude electoral de 2006.
2. Que el diálogo se celebre en las oficinas del gobierno legítimo de México, ubicadas en la colonia Roma del Distrito Federal.
3. Que no sea un diálogo en lo oscurito, sino, como propuso alguien, totalmente abierto al público, transmitido por televisión e internet y en el que se permita, mediante sistemas como twitter, la participación de los ciudadanos.
Posteriormente el Peje en entrevista con Jacobo Zabludowsky dijo que si iba, pero bajo ciertas condiciones (ninguna de las de don Fede, por cierto):
Andrés Manuel López Obrador aclaró que sí acudiría al llamado del presidente espurio, Felipe Calderón, siempre y cuando fuese para establecer un compromiso con un cambio verdadero, con modificar la política económica, con generar empleos, con atender a los jóvenes, con una coordinación entre todas las corporaciones policiacas en el combate a la delincuencia organizada y que ya no habrá más simulación ni farsa, porque "sería muy malo que a estas alturas yo forme parte de esta comparsa; no vamos a caer nosotros en ninguna simulación".
Si la convocatoria emitida por Calderón es en serio, el presidente legítimo de México dijo que sí aceptaría asistir a una reunión, porque "por encima de todo, está México y está el interés general". En vez de celebrar reuniones y de responder a llamados, "yo quisiera que se tomarán decisiones para cambiar la política económica", sugirió.
Si la convocatoria emitida por Calderón es en serio, el presidente legítimo de México dijo que sí aceptaría asistir a una reunión, porque "por encima de todo, está México y está el interés general". En vez de celebrar reuniones y de responder a llamados, "yo quisiera que se tomarán decisiones para cambiar la política económica", sugirió.
Trimax comenta:
Desde el 2006 soy un firme partidario de que se junten y encierren en un cuarto y se agarren a madrazos, creo que la mayoría de los pleitos actuales del país están derivados de la guerra de egos entre esos dos y que no se van a resolver mientras uno no le diga al otro sus netas.