martes, 9 de febrero de 2010

La de Siempre!


Éste trabajo provocó la ira del senador panista Salvador Abascal Carranza, quien además envió una carta que se publicó en la revista quejándose de mi falta de respeto a la iglesia católica, de mi visión visceral a la figura femenina y de mi crítica constante a la gestión de Calderón. Me voy a ir al infierno, que chido.