lunes, 29 de agosto de 2011


PAÍS DE OPORTUNIDADES
MAGÚ, EN LA JORNADA

AHORA QUE AVANZA EL NARCOCRIMEN,
EL GOBIERNO DEBE REPLEGARSE

Los 53 muertos de Monterrey fueron 53 asesinatos que ya no los califica el gobierno como “daños colaterales”, sino como acto de terrorismo puro.

Por primera vez el gobierno ve que los enemigos a los que ha perseguido por pueblos y montes con efectos colaterales menores, tienen intención criminal y capacidad logística para asestar golpes contundentes escalando sus acciones atacando a la sociedad civil.


En cualquier país, un atentado masivo de esta naturaleza despertaría la indignación social al mismo tiempo que el apoyo a las acciones de respuesta de las autoridades.

La indignación social allí está, pero aparece confundida, exigiendo no más asesinatos, pero pidiendo al gobierno que se rinda y que renuncie a la estrategia, y, en el caso de Monterrey, que renuncie el gobernador.

“¡QUE RENUNCIE EL GOBERNADOR!”

MARCHA EN MONTERREY

Sólo en nuestro país mezquino y nopalero este ataque es usado por la oposición como una razón más para pedir que el gobierno retire de la calle al ejército y a la marina y abra una pausa hasta que haya una mejor estrategia para enfrentarlas...

Por un momento imaginemos que los carteles no son para comerciar droga sino grupos revolucionarios dotados de ideología que han decretado la guerra al gobierno...estaríamos viendo a un estado acorralado, incapaz de contener a los subversivos y en riesgo de ser expulsado del poder institucional...

A un estado así no se le puede pedir que renuncie a sus deberes y se meta bajo la cama...creo yo.

DESPLIEGUE DE EFECTIVOS FEDERALES
HACIA LA CIUDAD DE MONTERREY

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