SALUDOS,
A LOS SACATRAPEROS
EN UN NUEVO AÑO QUE NO SERÁ DIFERENTE,
EXCEPTO POR EL NÚMERO,
AL AÑO PASADO.
¿Pero qué nos queda ante esa necia realidad?
Aguantarla, verla, ignorarla,
analizarla, rechazarla, aceptarla,
cotorrearla y verla con humor,
con gran sentido del humor.
Ese es el sentido que debemos afinar este 2011.
Por lo demás, ¡vengan las Ceronos!