UN amigo mio, Luis Gómez Sandi, me manda desde San Juan de los Lagos, en Jalisco, este dibujo inspirado por un vendedor de libros sobre el fin del mundo que se encontró recientemente en un viaje a León, Guanajuato...¡qué loco!
Para que se vea que todavía hay quién se preocupa por los guajopavos.