
"Hedonismo y espiritualidad: la excelencia expresiva de Venegas. 25 años de producción artística, en óleos, dibujos y tallas en madera.
Venegas: el maestro del expresionismo en la plástica mexicana.
A partir del 15 de agosto, el Museo de Arte Moderno abre al público una exhaustiva revisión de la obra de Germán Venegas, curada por Patricia Sloane, y conformada tanto por las piezas más relevantes, provenientes del taller del artista, de préstamos de colecciones particulares, y de museos privados y públicos del país.
Cabalgando el tigre es una exposición emblemática para toda una generación plástica, y es clave para entender los causes de la investigación pictórica y escultórica en México, en las últimas dos décadas.
Con esta muestra Venegas se nos revela, sin discusión, como un puntal indispensable en la producción artística mexicana, de las últimas tres décadas".
De arte comprendo muy poco y más bien he decidido desde hace tiempo guiarme por el consejo sabio de mi maestro del taller de artes plásticas de la secundaria, egrasado él de la Academia de San Carlos: "El arte es gustarte".
Lo que vi me gustó mucho. Tallas en madera muy buenas, enormes, cotorras y pues con esa cosita rara que llenan la pupila muy cachondamente. De esa visita al MAM regresé con hartas fotografías y de las cuales les comparto algunas:
"Costal de huesos".
"Chac mool".
Aprovechando el viaje me di la vuelta por otras salas del MAM y me topé con uno de mis cuadros favoritos:
La última véz que lo ví en vivo fue en el Carrillo Gil, yo tenía como 9 años y llevaba un frutsi en la mochila, desde entonces me apantalló gruesísimo: "El diablo en la iglesia", ya saben de quién.
Mi paseo de sábado distrito federal prosigió por los rumbos del castillo de Chapultepéc. Siendo este el mes patrio me pareció buena idea empaparme de historia en el mismo lugar donde sucedieron los hechos. Del interior del castillo y de sus afueras, traje estas fotos:
Mirando estos fabulosos vitrales coronados por el escudo nacional no pude evitar pensar en el día que estuve a un tris de pisar la cárcel por ponerle un condoncito a esa misma serpiente en la cabeza... chale, mi cartón más polémico y sin necesidad de publicarlo en papel.
Diego Rivera en este mural hace a Miguel Hidalgo gritar para toda la eternidad un grito de libertad: ¡A coger gachupines! (que no se espante el de Bucareli).

Ese fue otro sábado Distrito Federal.